*Texto publicado originalmente en la Jornada de Oriente
La popular red social de Mark Zuckerberg se ha consolidado como una referencia en lo relacionado con la tecnología y con la comunicación. Su creciente número de usuarios y la configuración de estrategias financieras, mercadológicas y de promoción han hecho que Facebook se convierta en una referencia obligada en diversos sectores. Desde la incursión en el sistema multiplataforma que permite hacer publicaciones de otras redes como Twitter y chatear con los contactos; incluir juegos de gran popularidad como Angry Birds y a pesar del nuevo formato Biografía que ha generado opiniones tanto a favor como en contra, dicho sistema de información sigue siendo la reina de las redes en cuanto al dominio en público, publicidad, ingresos y valor de empresa, y parece que el camino va en ascenso.
La estrategia más reciente fue la de la compra de Instagram, aplicación de fotografía que permite a los usuarios editar las tomas realizadas a través de filtros y enfoques de manera muy básica para compartirlas con otros, y que según cifras de CNN este año alcanzó los 30 millones de seguidores. El sistema también incluye etiquetas (como
Twitter), que sirven para realizar búsquedas de intereses en común. Tal aplicación que se ha convertido en una de las aplicaciones de foto más populares en los teléfonos inteligentes. Con el buen ojo que ha caracterizado al emporio de Zuckerberg, la compra de Instagram fue anunciada en la propia página de la red el 9 de abril de 2012, anunciando que la gustada aplicación de fotografía había sido adquirida por la red social por la nada despreciable cantidad de mil millones de dólares, pero de inmediato hubo reacciones desfavorables por las faltas de cuidado en la privacidad de los usuarios de
Facebook, y algunos analistas predijeron incluso el abandono masivo de usuarios por la reciente adquisición (
http://mexico.cnn.com/tecnologia/2012/04/10/lacompradefacebookainstagramarruinaraalaappdefotografia).
Hay que reconocer que la gran red social está operando con cautela, ya que anunció que Instagram seguirá funcionando de manera independiente de Facebook, cosa que podría paliar los temores de los usuarios que buscan proteger su seguridad, aunque los números hablan por sí solos: a pesar de la gran cantidad de personas que reniegan de la reina de las redes, ya hay mil millones de cuentas, pero deberemos seguir cuidando la información que difundimos y los contactos que aceptamos, especialmente de los más jóvenes, que a veces, en busca de aceptación o de construcción de identidad, pueden cometer errores.
